«Volveré y os llevaré conmigo para que también estéis donde yo estoy». Juan 14:3
El capítulo final de Billy Graham. Experimenta la gloria del cielo mientras Billy Graham, el amado evangelista, comparte desde su pasado, y su presente, la realidad de la eternidad.
Mientras nuestra nación y el mundo se debaten en medio de incertidumbres políticas, económicas y culturales, podemos encontrar consuelo en la esperanza que proviene de la verdad inmutable de la Palabra de Dios. Tanto si habla con un presidente de EE.UU., con un líder mundial o con el hombre común, como si es entrevistado en una cadena de televisión, Billy Graham siempre ha comenzado sus respuestas con «La Biblia dice...»
En Donde yo estoy, el Sr. Graham comparte lo que la Biblia tiene que decir sobre la eternidad a partir de sus sesenta y seis libros; mensajes de verdad, advertencia, amor y certeza del futuro, todos ellos espigados por un hombre al que le gustaría ser recordado únicamente como predicador del Evangelio de Jesucristo.
La mayor promesa jamás dada a la raza humana salió de los labios de nuestro Redentor cuando Jesús dijo: «No se turbe vuestro corazón; si creéis en Dios, creed también en mí... Voy a prepararos un lugar... Volveré y os recibiré a mí mismo, para que donde yo esté, estéis también vosotros» (Juan 14:1-3). Justo después de cumplir noventa y cinco años, el Sr. Graham proclamó con determinación: «Cuando muera, di a los demás que me he ido con mi Señor y Salvador Jesucristo; allí es donde estoy».